domingo, 3 de marzo de 2013

The things don´t kill you, make you stronger.

Hoy volví otra vez a aquel jodido antro. Estuve allí durante dos horas, más o menos, intentando no pensar en todo lo que viví allí. Aquellas paredes con cuadros horribles, y aquel techo con humedades seguían en su sitio, y el frío que nos congelaba los pies, tampoco se había marchado. La verdad es que me dio tiempo a recordar de todo un poco; recordé las funciones que hacía cuando medía menos que mi madre, recordé las funciones que hice cuando ya medía más que ella, recordé las veces que subí aquellas escaleras de madera que chirriaban aunque subieras despacio y casi sin pisar; las bambalinas seguían igual de llenas de mierda, como siempre, con los trozos de celo mal quitados, y el tipex de la gente que se aburría mientras esperaban dentro su turno para salir a actuar. La última vez que estuve ahí, fue, si mal no recuerdo, hace 2 años, y la verdad, el haber ido hoy me ha ayudado a pensar más en lo que ya sabía; no me he alegrado tanto nunca de haber salido de allí. Gracias a que me fui de allí, conocí a gente maravillosa, y a gente no tan maravillosa, conocí a gente a la que hoy adoro, y gente a la que le giro la cara cuando me la encuentro por la calle; he sentido, he reído, he llorado, he gritado; he vivido, y fue gracias a que salí de ahí, que hoy, soy lo que soy. Odio ese lugar, cada jodido rincón de aquel edificio, y lo que tengo seguro, es que no volvería por nada del mundo, porque he aprendido lo que es ser feliz, lo que es llorar de felicidad, lo que es encontrarse cada día con amigos de verdad, con esos que te sorportan cuando estas de buenas, de malas o de regulares, y eso, es algo que en ese antro no hay. No me ha fastidiado el volver a allí, sobre todo, porque he vuelto con un buen motivo, eso es lo único bueno, aunque al salir, tenía los pies y la nariz helados, como si me estuviera diciendo: "Jódete, te has ido, pero te vas a estar acordando de este sitio hasta que llegues a casa y te arrimes al radiador" Pero sobre todo, hoy más que nunca, he pensado que tengo un motivo más para sonreír; tengo que sonreír para joder a todos los que pensaron que me quitarían mi sonrisa, tengo que sonreir, porque ahora sé, que puedo ser feliz lejos de todos ellos.



Hoy, sé que puedo, porque no tengo motivos para estar triste, o desanimada *excluyendo el examen tan maravilloso que tengo dentro de unas horas y que me va a hacer quedarme de empalmada toda la noche* que tengo más razones para sonreir que para llorar, y que no les pienso dar una satisfacción de ese tamaño a toda esa panda de desgraciados hijos de puta. Espero que me veais por la calle y os pregunteis cómo puedo seguir sonriendo.




"I'm not a lover, I'm not a fighter, but I'll fight for what I love"

miércoles, 12 de septiembre de 2012

"If she is with me, everything it´s ok."

Siempre fui de las que pensaba que las fiestas tenían que ser con mucha gente; tenías que estar en un local, donde la gente no te dejara moverte, la música retumbara en tus oídos, algún borracho te tirara la copa en tu nuevo modelito, y tenías que volver a casa a las cuatro de la madrugada completamente borracha. Pero con el paso de los años, he descubierto, que las mejores fiestas se hacen en casa; no me refiero a una fiesta de esas en las que suben tus vecinos a decirte que bajes la música, y en el que la gente vomita en tu felpudo, no. Una fiesta es estar con las personas que quieres, el rato que quieres, sonriendo, jugando, pasándotelo bien; no importa si sois dos o doscientos, lo que importa es cómo sea esa persona. Ahora, años después, me he dado cuenta de que mi mejor fiesta es con ella.

Somos burras, duras de mollera, cabezonas, orgullosas, y muchas veces, decimos cosas de las que luego nos arrepentimos, ¿pero sabéis qué? que por mucho que nos digamos, nos insultemos o discutamos, siempre seremos ella y yo, porque no hay más, porque sí, porque mi destino solo hizo una cosa bien, y fue dármela como hermana. Hay veces que la odio, que quiero tenerla lejos, que no quiero que me hable; pero es verdad eso de que "Valoras algo cuando lo pierdes", y la verdad siento haberme dado cuenta tan tarde, pero como se suele decir, más vale tarde, que nunca.




Cuando vuelvas, tendremos una fiesta impresionante; los vecinos no tendrán que subir a decirnos que bajemos la música, y nadie vomitará en el felpudo, pero te puedo prometer que será la mejor fiesta que hayas tenido nunca en tu vida.















Grita con todas tus fuerzas "estoy aqui", como si fuera prueba de que existes. No somos tan débiles, pero tampoco tan fuertes. Llorando, buscando, riendo, cayendo, llorando otra vez. Asi es como te conviertes en adulto. Si siempre trato de no llorar, no seré capaz de sonreír.

lunes, 9 de enero de 2012

Por un nuevo comienzo.

Cada paso hacia delante es un nuevo comienzo. Al igual que las estaciones llegan, lo cambian todo tiñéndolo de diferentes y hermosos colores y sentimientos, y se van, las personas tenemos la capacidad de vivir segundo a segundo de ellas con todos y cada uno de los latidos de nuestro corazón. Un café por las mañanas es como el primer suspiro apenas te levantas. Y como tales, mejor acompañados que solos. Empieza a pensar cómo quieres vivir, qué es lo que tu corazón más ansía ser y conviértete en ello con tu esfuerzo y luchando día a día. Los imposibles también existen y si existen es por la única razón de volverlos posibles. La realidad no es fácil, por eso las decisiones más acertadas son siempre las más complicadas. No te dejes arrastrar, pero déjate llevar con cuidado. Cmple tus sueños y vive tu vida, no la de nadie más. Porque yo te quiero tal y como eres, y tal y como serás. Solo diré una cosa que nunca jamás debes olvidar, aparte de que siempre estaré aquí a tu lado. Sé tú. No otra. Sé solamente tú.
















Vayamos donde vayamos y estemos donde estemos, siempre viviremos bajo el mismo cielo. 
Nane.